La multitud reunida en la explanada del Zócalo capitalino. EFE
MEXICO .- México comenzó las magnas celebraciones por el bicentenario del inicio del movimiento de Independencia con una ceremonia prehispánica denominada del "Fuego Nuevo", que busca dotar simbólicamente de paz y armonía a un país marcado en los últimos años por la violencia del narcotráfico.
En medio de fuertes medidas de seguridad, miles de mexicanos se reunieron este miércoles a lo largo de 2,7 kilómetros para presenciar un desfile alegórico y en la explanada del Zócalo capitalino, donde el ritual del "Fuego Nuevo" marcó el inicio de las celebraciones con representantes de diversas comunidades que danzaban y quemaban copal para recordar la ceremonia prehispánica que representa el inicio de un nuevo ciclo.
Poco después, cerca del monumento del Angel de la Independencia, un grupo de mariachis hizo sonar las trompetas y comenzó un desfile de 27 carros alegóricos con miles de voluntarios que recordaron algunas etapas de la historia del país.
A los mariachis le siguió una réplica gigante de un barco de papel que simulaba navegar sobre un mar de nopales verdes, blancos y rojos, los colores de la bandera nacional. Sobre ellos, un globo aerostático sostenía a una mujer ataviada como el Angel de la Independencia.
"Es la conmemoración de la independencia... nos debe de emocionar por todo lo que se logró", dijo a la AP Daniel Mendiola, sin despegar la mirada de una de las pantallas gigantes colocadas en el monumento del Angel.
Pero para el hombre, un jubilado de 64 años, las festividades acabarían al final del desfile: no pensaba quedarse a los conciertos con artistas mexicanos, debido a temores de que pueda pasar algo.
"Estamos con esa duda... por eso me voy (al final del desfile), por la idea de que vaya a haber algún problema más tarde", dijo.
Los festejos se realizan con la presencia de miles de policías, detectores de metal y helicópteros que sobrevolarán la zona centro de la capital, la mayoría de cuyas calles han sido cerradas para permitir de manera gradual el ingreso de los más de un millón de mexicanos que se esperaba asistirían.
Poco después de iniciar los actos, autoridades de Protección Civil estimaban que unas 60.000 personas se encontraban distribuidas por Paseo de la Reforma, la ruta del desfile, y unas 25.000 más en la plancha del Zócalo.
Procedente de Veracruz, en el este del país, la señora Iris Mari Rodríguez no dudaba que estos festejos serán "lo mejor que voy a ver en cualquier 15 de septiembre".
Acompañada de cinco familiares, la comerciante se emocionaba desde el Zócalo: "Amamos México y como México no hay dos".
Para Rubén Gil, un profesor de primaria que llegó desde el estado central de Guanajuato, "esta es una celebración especial (y) por eso quise venir".
Muchos de los ojos están puestos en la ciudad de México, donde se han preparado los mayores actos.
Además del desfile, habrá por la noche conciertos masivos con artistas como Paulina Rubio y los Tigres del Norte, y un magno espectáculo de fuegos artificiales para rematar con el tradicional "grito", en el que el presidente Felipe Calderón recordará desde el Zócalo el llamado del cura Miguel Hidalgo en 1810 que dio inicio a la lucha de independencia de España.
"Hoy es un día de fiesta y conmemoración. México es una gran nación, con historia y cultura extraordinarias y futuro promisorio. Felicidades!", escribió el miércoles el mandatario en su cuenta de twitter.
"Nadie nos va a quitar nuestro derecho a celebrar con gozo", había dicho el martes Alonso Lujambio, secretario de Educación Pública y coordinador de los festejos, al ser interrogado sobre algún posible temor por la seguridad.
El gobierno ha mandado insistentes mensajes a la población de que es momento para celebrar, pero también ha reforzado la seguridad en los lugares donde se ha decidido no dejar pasar de lado los 200 años de la Independencia del país.
Las celebraciones se dan en un entorno de violencia del narcotráfico en algunas zonas del país y con el antecedente de que en 2008 un festejo de la independencia en la ciudad occidental de Morelia, capital de Michoacán, se vio ensombrecida por un ataque de granadas a la población que dejó ocho muertos y 106 heridos.
En el balneario turístico de Cancún, seis presuntos miembros de una célula del narcotráfico fueron detenidos el miércoles con tres granadas y siete largas, aunque las autoridades aún investigan si planeaban algún ataque durante las celebraciones.
Las celebraciones continuarán el jueves con una visita de Calderón a Dolores Hidalgo, en el estado central de Guanajuato y donde el cura Hidalgo arengó a la población para luchar por la Independencia, la cual se consumó en 1821.
El mandatario volverá a la capital para el mismo jueves encabezar un desfile militar, en el que además de las fuerzas armadas mexicanas participarán contingentes de 17 ejércitos extranjeros.
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