Saturday, September 11, 2010

Agencia de noticias
Buenos Aires.- El entrepiso de una discoteca se derrumbó hoy, viernes, durante una fiesta privada, con un saldo de dos muertos y 25 heridos, todos fuera de peligro.

El accidente ocurrió durante la madrugada en el sector más exclusivo de la discoteca Beara, del barrio de Palermo de la capital argentina, dijo el ministro de Salud porteño, Jorge Lemus.

Las dos personas fallecidas son Adriana Lizarraga, de 20 años, y Leticia Provedo, de 21, informó el Hospital Fernández, a donde fueron trasladados los cuerpos.

Un total de 20 heridos, de entre 18 y 29 años, fueron derivados a distintos hospitales mientras que otros cinco acudieron por sí mismos a centros médicos, según explicó a periodistas el director del Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME), Alberto Crescenti.

Sergio Aranda, integrante del grupo musical Ráfaga, que acababa de finalizar su recital en la discoteca, dijo que "escuchamos un ruido espantoso y comenzó el calvario".

"Había gente llorando por todos lados", destacó Aranda al canal de cable Todo Noticias. Agregó que se trataba de una fiesta privada en la que había unas 300 personas.

El entrepiso que cayó, sin que por ahora se conozca el motivo, era de aluminio y placas de durlock, o yeso revestido, con partes de madera. Tenía una superficie de unos diez metros de ancho por siete de largo y estaba a unos 32 pies de altura, dijo a la prensa el comisario inspector Carlos Álvarez, de la Superintendencia Federal de Bomberos.

El local estaba habilitado para funcionar y el número de personas que había dentro no excedía el límite establecido, dijo el gobierno porteño.

Se realizaron varias inspecciones en el último año con buen resultado, dijo a periodistas el jefe de gabinete capitalino, Horacio Rodríguez Larreta, quien puntualizó que si bien el lugar estaba habilitado, se pudo haber hecho "un mal uso de las instalaciones".

Pablo Díaz, uno de los testigos, señaló que poco antes del hecho centenar de personas saltaban en el entrepiso que se desmoronó.

La jueza a cargo de la investigación pidió al gobierno de Buenos Aires que le informe sobre los pasos que dio para habilitar el local, que funcionaba como restaurante y lugar de bailes y fiestas privadas.

Uno de los responsables del negocio se presentó espontáneamente ante la justicia y declararía en las próximas horas.

Diputados capitalinos de la oposición señalaron que el local no tenía permiso para realizar espectáculos musicales en vivo.

Este hecho ocurrió justo un mes después de que tres personas murieron por el derrumbe de un gimnasio en el barrio de Villa Urquiza, muy cerca de Palermo.

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