protagonistas Manny Pacquiao (izquierda) y Antonio Margarito se disputarán la faja superwélter del CMB.
(Suministrada / Chris Farina / Top Rank)
Carlos González / Primera Hora
Manny Pacquiao hizo historia en marzo pasado en el Cowboys Stadium en Arlington, Texas cuando sobre 50,000 personas presenciaron su victoria sobre Joshua Clottey en el primer evento de boxeo en esa moderna localidad.
Ayer, Pacquiao regresó a ese mismo escenario para promocionar su próxima batalla este sábado ante el mexicano Antonio Margarito, un hombre que claramente lo supera en estatura, alcance y peso.
“Será una gran pelea. Estoy seguro que habrá mucha acción dentro del ring y ése es el tipo de pelea que me gusta”, comentó Pacquiao durante la conferencia de prensa.
“Los dos hemos trabajado duro y estamos listos. Que nadie piense que no estaré bien preparado”.
El filipino buscará este sábado sumar otro logro a su extensa lista de éxitos cuando intente conquistar el cetro superwélter (154 libras) del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
Para Margarito, derrotar a quien es considerado el mejor boxeador libra por libra le ayudará a recuperar algo del brillo que perdió debido al escándalo sobre las vendas ilegales que alegadamente fueron colocadas en sus manos antes del combate contra Shane Mosley en el 2009. La licencia de boxeador le fue revocada a Margarito y luego denegada al cabo cumplir una suspensión de un año impuesta por la Comisión Atlética de California, hasta ahora, ya que la comisión de Texas le concedió el permiso.
“Llegó la hora. No tengo pretextos”, dijo Margarito. “Estoy mejor que nunca. Por alguna razón que no puedo explicar, ha sido el mejor campo de entrenamiento de mi carrera y estoy seguro que voy a ganar. El CMB tendrá un nuevo campeón mexicano”, agregó.
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